El año 1917 se inauguró el Cine Ideal, uno de los cines de barrio más importante de Barcelona y que popularmente era conocido como “El Rellis o El Rellisquín”, por la antigua pista de patinaje sobre ruedas que fue una de las primeras propuestas destinadas al ocio de la población obrera del barrio.
El año 1920 se hizo una ampliación del local diseñada por el arquitecto Manuel Joaquim Raspall y Mayol, que permitió pasar a una capacidad para 2600 espectadores en una superficie de 2500 metros cuadrados.
En 1928 el cine Ideal fue adquirido por la empresa Cinematográfica Nacional Española Sociedad Anónima (CINAES), durante estos años y durante la Segunda República se celebraron actas de tipo político, tan organizados por entidades como por los mismos partidos.
Durante los años setenta la sala fue adquirida por la empresa de Pedro Balañá, propietario de muchos cines barceloneses, aquello supuso la modernización del centro para adaptar el diseño del edificio a los nuevos tiempos. A mediados del siglo XX este cine representó un importante lugar de ocio popular, en el cual a los fines de semana se formaban colas al exterior del edificio que provocaban que algunos espectadores tuvieran que ver las películas de pie. El cine, con más de 2500 butacas, estuvo activo hasta el 13 de mayo de 1984, cuando cerró sus puertas con las proyecciones de las películas de Psicosis II y Paco lo seguro.